‘Una Casa Llena de Dinamita’ es una de las grandes sorpresas de la parrilla de Netflix de las últimas semanas. Dirigidas por Kathryn Bigelow y escrita por Noah Oppenheim, este thriller político presenta un escenario que por desgracia está un día malo de cualquiera de poder producirse. El sistema de seguimiento de misiles de los Estados Unidos detecta el lanzamiento de un misil no identificado que desencadena una carrera a contrarreloj dentro de los más altos niveles de gobierno para determinar quién está detrás del ataque y cómo responder.

Repleta de estrellas, destacan como más artistas principales Idris Elba, como presidente de los Estados Unidos o Rebecca Ferguson, como oficial de alto rango de la Sala de Situaciones de la Casa Blanca. Pero aparecen una retahíla de secundarios con mucho peso como Jared Harris, en su papel de Secretario de Defensa o en menor medida Jason Clarke. Es cierto que el formato de la película no permite que ninguno brille en exceso, pero ver a tanta cara conocida demuestra que el proyecto de este película iba muy en serio.

Me recordó un poco a la película de Ridley Scott, El Último Duelo (2021). También partida en tres actos diferentes, pero que en el fondo cuentan la misma historia. Cada acto con los matices propios de cada personaje protagonista, a medida que se va avanzando en la película puedes ir completando los detalles abiertos que surgen en los primeros minutos de la película. Aunque no es habitual, es un formato que no me acaba de desagradar.

Bigelow vuelve con fuerza a un terreno que domina: la tensión institucional, el protocolo militar y la sensación de estar al borde de un abismo. La puesta en escena es hábil: cámara nerviosa, montaje ágil, escenarios de crisis que crean una sensación auténtica de urgencia. Además, plantea una pregunta inquietante: ¿qué tan frágil es la paz nuclear? ¿Cuántos mecanismos fallan cuando todo se reduce a un error, una decisión, una fracción de segundo?

Todos estos detalles crean un escenario en el que el espectador se mantiene en tensión desde el primer minuto. La construcción de los personajes importa poco. Si que es cierto que la manera de introducirlos en cada acto de la película permite entender el contexto de las dudas que tiene cada uno al afrontar una situación que puede provocar el colapso de la civilización. Pero dada la manera en la que se ha estructurado la película no hay otra forma de hacerlo y eso hace que vivas con la adrenalina desde el primer minuto.

El problema al que se enfrenta ‘Una Casa Llena de Dinamita’ es su cierre. Sin entrar en spoilers, pero las críticas que rodean a esta película, y lo que hace que no pueda decirse que sea redonda es su final tan abierto. Parece que es una película que se dedica a explorar la mente y el sistema cuando se produce una catástrofe sin precedentes. Va cargando de tensión al espectador hacia un punto inevitable, pero cuando el contador llega a cero, Bigelow deja que nuestra imaginación haga el resto. Este final tan abierto y poco contundente deja con las ganas de más.

Me quiero detener finalmente en la banda sonora compuesta por Volker Bertelmann. Las estrellas no están solamente sobre la pantalla, sino detrás de ella. El ganador del Oscar por Sin Novedad en el Frente (2022) vuelve a dejar una banda sonora potente, en la que la mezcla del sintetizador, los instrumentos de cuerda (mención especial al violonchelo) y piano transforman la atmósfera de la película, impregnando de tensión cada escena de la película. Me recuerda un poco a la obra de Ludwig Göransson en la película de Oppenheimer de Christopher Nolan.

Siempre he sido un fan de las películas de Bigelow. Por su ritmo, por su tensión o los conflictos que se presentan en los personajes. ‘The Hurt Locker’ o ‘Zero Dark Thirty’ son títulos que no envejecen. Tengo la sensación de que con ’Una Casa Llena de Dinamita’ va a pasar lo mismo. Aún con sus cosas, esta película es un soplo de aire fresco dentro de las siempre superpobladas plataformas digitales. Una historia bien contada, con un final algo defectuoso, pero que consigue atraparte desde el primer minuto.

Dirección

Guion

Personajes

Ambientación

Banda Sonora

Puntuación

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